lunes, 29 de septiembre de 2008

¿Nueva guerra entre Musulmanes?

No es cosa nueva que en la religión, fundada por el Profeta Mahoma, sunitas y los chiítas mantengan una rivalidad constante.
Los sunitas (80% de los musulmanes), consideran que para la sucesión legal de Mahoma es condición suficiente que el califa sea capaz y adecuado para dirigir espiritual y secularmente a los musulmanes.
Los chiítas, exigen que el califa sea un pariente sanguíneo de Mahoma. Además de a Alí (esposo de Fátima, hija de Mahoma) a sólo a otros once imanes religiosos. El último de ellos, Al Mahdi, no ha muerto, sino que vive oculto desde el siglo IX. Hasta su regreso, los sabios chiítas son sus administradores.
Además para los sunitas, el imán sólo es el recitador en la mezquita; para los chiítas, los doce imanes son guías político-religiosos por los cuales se debe orientar la comunidad.
Los alauitas son también chiítas en sentido amplio, pero rechazan la Sharia. Los alevitas rechazan asimismo las severas reglas de fe que deben observar sunitas y chiítas y se concentran en el sentido profundo del Corán. En las reuniones rituales tienen gran importancia la música, los bailes rituales y las poesías de contenidos religiosos. Las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres. Los alevitas defienden consecuentemente un orden social secular, por lo que en Turquía son a menudo objeto de represalias por parte de la mayoría sunita.
Ahora se presenta nuevamente el conflicto, cuando Yusef Al Qaradawi, un referente crucial para la comunidad sunita, denunció que los chiítas, son “heréticos” y utilizan sus recursos para invadir sus adeptos y convertirlos a su tradición.
Este tipo de declaraciones, no son tan tolerables en el mundo islámico, como sí podrían serlo, las declaraciones entre los dirigentes de las distintas denominaciones cristianas, en occidente.
No es cualquier cosa, que dos facciones religiosas, dispensen acusaciones reciprocas acerca de la legitimidad de sus creencias, más cuando, son vistos ambos bandos, con desconfianza por Occidente y Asia.
Ojala y se pueda solucionar estas fracturas entre los herederos del Profeta Mahoma, porque de lo contrario, estaremos en presencia, de una cruel guerra como la que vemos en Irak o en otros países. Un enfrentamiento más, sería otra tragedia para la humanidad. Ya tenemos suficientes guerras, para que se añada una nueva guerra fraticida. Oremos por la paz!!!!!!

No hay comentarios: