El Chavismo: Un bazar de ideas y supersticiones

Cuando caminas por Caracas –especialmente por el centro— observas locales que venden distintos artículos religiosos o místicos. Estos negocios exponen estatuas de vírgenes, santos católicos, figuras y herramientas que son utilizados por los santeros y paleros (la corte de los santos, la corte de los héroes patrios, la corte indígena, la corte Malandra, las tres potencias, etc.) hasta herramientas masónicas. En fin venden de todo y revelan lo que somos: Un país lleno de sincretismo religioso.

Sin embargo, debemos decir que no sólo es la religión sino que el Chavismo y el propio Chávez son mundos complejos y sincréticos.
El Chavismo parece una tienda de brujería y por decir esto, no quisiera ofender ni a los chavistas ni a los espiritistas. Lo que quiero decir, es que el chavismo puede abarcar una gama amplísima de segmentos ideológicos y personajes históricos, que al líder le guste o le llame la atención.

El chavismo –como buena secta— ha construido mediante una simbología característica y unos códigos, su forma de actuar y de pensar. Cada día se asoma a la ventana verborréica de líder, una cantidad de personajes y de fragmentos ideológicos que al final, parece una tienda del centro de Caracas.

Desde Bolívar, la Revolución cubana y todas las momias que todavía gobiernan Cuba, hasta el “hermano Putin”, están incluidos en la ideología y en el discurso chavista. Hablan del socialismo, del humanismo cristiano, del marxismo cristiano (teología de la liberación), del fidelismo, de los héroes de la Independencia (menos Páez y Santander por fascistas y asesinos…???), del ilustre Zamora, de Maisanta, Mugabe (ese si es pana, pana), Alexander Lukashenko (éste es mas pana que Mugabe), Ahmadeniyad (sin palabras), del Che, del Chavo del 8, de los movimientos de resistencia, de Mao, del Socialismo del siglo XXI, del panamericanismo y el multipolarismo, de la doctrina antiimperialista, del cristianismo católico anti-iglesia venezolana, del desarrollo endógeno, de los movimientos subversivos latinoamericanos, el pana Reyes, Alí Primera, Alí Can, Cantinflas, de “mi hermano Berlusconi”, antiglobal, antiburguesía, antifascismo y pare usted de contar.

En nueve años de gobierno y dieciséis años que apareció el grupo insurgente y golpista, estamos escuchando un sinfín de raíces y de enredos ideológicos, que han traído como consecuencia un retroceso gigante y la construcción de un Estado anacrónico, corrupto y pretoriano.
Ojala y algún día podamos salir de tantos atavismos históricos, que podamos construir un Estado moderno, competitivo, prospero y con índices de riqueza per cápita mas igualitarios.

Amigos, estamos atrapados en esta tienda de artículos esotéricos que nos reduce cada día nuestras libertades. Ojala y veamos pronto, movimientos políticos con bases sólidas que propongan y construyan un mejor país porque de lo contrario, nuestra suerte estará dominada por los arcanos y las predicciones (poco afortunadas) de alguna bruja.

Mientras tanto, veremos a que otro personaje mesmo o que otra súper ideología nos van a vender para sostener la “revolución bonita”.